Es una historia muy recomendable, en especial, para adolescentes que son aquellas que muchas veces tienen la poca fortuna de vivir este tipo de situaciones y no contar con los recursos para poder alejarse de ellas. Es una linda historia que tiene muchos mensajes sumamente positivos, y que deja traslucir en todo momento esa idea que la autora escribe en aquellas palabras iniciales que nos dan la bienvenida a esta novela, enseñándonos y recordándonos la importancia de vivir el momento, disfrutar de cada una de las edades y etapas, entender que la vida es larga y nos tiene reservado un momento para todo aquello que anhelamos. No obstante, cierto es que, muchas veces la vida no se presenta de esta manera, y son esos momentos los que debemos afrontar con valentía, adultez, y sin jamás pensar en conformarnos con lo que nos toca; los peores escenarios y los destinos más trágicos pueden tener un final feliz cuando existe un deseo de cambio y de una vida mejor. Los invito a seguir reflexionando con el relato de esta autora, que esperamos tenga muchos más por compartirnos.
Lucia, su protagonista, se casa a los 17 años, embarazada y forzada por su madre, quien lejos de prestarle su apoyo incondicional, la echa de su casa desentendiéndose de todo vínculo para con ella. Enamorada de su marido, creía que, más allá de su corta edad y a pesar de no contar con el amor y sostén de su familia, viviría feliz y formaría su propia familia. El nacimiento de su hijo Matías va a dar vuelta su vida y destruir todas esas ilusiones que un principio se hizo; vivirá en carne propia la soledad, el desamor, la violencia, la pobreza y tendrá que encontrar las fuerzas para poder seguir y salir adelante, por ella y por su hijo, y alejarse de ese círculo vicioso que una y otra vez la envuelve y la lastima.